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¿Por qué los planes de movilidad no consiguen que usemos menos el coche?Este artículo forma parte de la memoria del Proyecto Bicisur que está realizando el Consorcio de Transportes. Por su interés lo reproducimos aquí.
Presentamos una selección de ejemplos de cómo se logra la intermodalidad entre la bici y el tren en los desplazamientos laborales de algunas áreas metropolitanas europeas. No pretende ser exhaustiva, sino lo suficientemente ilustrativa de distintas soluciones que podrían implantarse en Madrid y alrededores.
1. Bicicletas en origen para llegar a la estación
El empleo de la bici para acortar los tiempos de acceso a las estaciones, sobre todo de tren es bastante frecuente. Las propias estaciones disponen de grandes aparcamientos, frecuentemente vigilados, y en muchos casos con disponibilidad de algunos servicios auxiliares para el mantenimiento, o incluso negocios asociados a la bicicleta.
CAPACIDAD DE APARCAMIENTO EN ESTACIONES
En países donde la combinación bici+tren es relevante en el reparto modal, la disponibilidad de plazas de aparcamiento para bicis es especialmente generosa.
Un 15% de los usuarios del tren del área metropolitana de Copenhage llegan a la estación en bici, lo que implica la necesidad de estacionamiento para unas 10.000 bicicletas repartidas a lo largo de la red.
APARCAMIENTO DENTRO DEL ANDÉN
En algunas estaciones de Gran Bretaña es frecuente que existan aparcamientos de bicicletas dentro de los propios andenes, tras el control de acceso.
Este sistema garantiza la máxima rápidez en la combinación bici+tren y otorga el aparcamiento sólo a los usuarios del transporte público, evitando así su uso por otros ciclistas que no vayan a usar el tren y ofreciendo una protección adicional ante robos. Sin embargo, este sistema ofrece algunos problemas: no es posible saber si el aparcamiento está lleno hasta haber pasado el control, por lo que requiere poderse ver desde el exterior.
Su capacidad está muy condicionada por el espacio disponible y no ha de haber muchas barreras arquitectónicas. En algunas estaciones se ofrecen dentro de zonas valladas siendo en este caso de pago.
SERVICIOS ASOCIADOS EN LAS ESTACIONES
Es frecuente que según empiezan a concentrarse las bicis en las inmedaciones de las estaciones aparezcan servicios y negocios que ayudan al ciclista.
Los ferrocarriles daneses (DSB) ofrecen en 10 estaciones servicios ciclistas donde el viajero deja su bici por la mañana para revisar y recogerla al final de la jornada.
Un caso similar existe ya en Barcelona, en el vestíbulo de la estación de Sarría (FGC), en el que además de la reparación y complementos, el ciclista puede aparcar su bici incluso en taquillas cerradas.