Escrito por Juan Ochoa
Desde que se implantó en junio de 2014 el servicio BiciMAD, tardé mucho tiempo en atreverme a apuntarme al servicio después de haber leído mil y un artículos y malas opiniones sobre todos los problemas que estaban teniendo los usuarios y el propio sistema y un imposible funcionamiento óptimo. La idea y su concepto me gustaron desde el primer día, pero aún no quería dar el salto… hasta hace 7 meses.
Soy usuario de BiciMAD desde febrero de 2017 y, desde que cogí una de las bicicletas y di la segunda pedalada, en el momento que el motor de asistencia al pedaleo se activó y me impulsó con ese silbido futurista que tiene, entendí realmente el verdadero potencial de un sistema como BiciMAD y el uso de bicicletas eléctricas en una ciudad con una orografía como Madrid.
No puedo opinar como ha sido estos años el servicio hasta su municipalización, pero sí que puedo decir que desde que lo uso (coincidiendo con el comienzo de las mejoras del sistema) apenas he tenido problemas en las 15 veces que lo habré usado.
Menos del 1% de los viajes de biciMAD termina con una reclamación, su mínimo histórico
Sin embargo, no he venido a hablar de la reducción de incidencias, sino del potencial que tiene BiciMAD para utilizarse de forma ocasional y en momentos puntuales.
Desde que se implantó en junio de 2014 el servicio BiciMAD, tardé mucho tiempo en atreverme a apuntarme al servicio después de haber leído mil y un artículos y malas opiniones sobre todos los problemas que estaban teniendo los usuarios y el propio sistema y un imposible funcionamiento óptimo. La idea y su concepto me gustaron desde el primer día, pero aún no quería dar el salto… hasta hace 7 meses.
Soy usuario de BiciMAD desde febrero de 2017 y, desde que cogí una de las bicicletas y di la segunda pedalada, en el momento que el motor de asistencia al pedaleo se activó y me impulsó con ese silbido futurista que tiene, entendí realmente el verdadero potencial de un sistema como BiciMAD y el uso de bicicletas eléctricas en una ciudad con una orografía como Madrid.
No puedo opinar como ha sido estos años el servicio hasta su municipalización, pero sí que puedo decir que desde que lo uso (coincidiendo con el comienzo de las mejoras del sistema) apenas he tenido problemas en las 15 veces que lo habré usado.
Menos del 1% de los viajes de biciMAD termina con una reclamación, su mínimo histórico
Sin embargo, no he venido a hablar de la reducción de incidencias, sino del potencial que tiene BiciMAD para utilizarse de forma ocasional y en momentos puntuales.