Dani llegó solo y no se nos unió nadie, al parecer porque la ruta no fue publicada en el blog. Esto para mí fue un lujo, un guía particular para mí solo, lo siento por los que se lo perdieron.
Antes de salir Dani hizo una pequeña introducción a los puntos más importantes de circulación (tratar de evitar las subidas prescindibles, ir por el centro de la calzada, no ir por las aceras porque los de movilidad acechan, respetar los pasos de cebra, los pasos de cebra son aceras para la ley, etc) y de equipo (vale cualquier bici pero lleva luces y reflectantes).
El itinerario me sorprendió muy gratamente. No sólo evitaba tres errores de mi anterior ruta ( las calles poco recomendables en cuesta arriba de Delicias y Alcalá, derivado de este error el usar las aceras por miedo al intenso tráfico, y la subida prescindible en la cuesta del ángel caído en el Retiro) sino que también me descubrió auténticos remansos de paz como el barrio de casitas detrás de Dr Esquerdo a la altura de Conde de Casal.
Ver Legazpi - Arturo Soria en un mapa más grande
Dani me ha conseguido transmitir una idea, que no es tan obvia o inmediatamente práctica como los consejos de seguridad, pero que me parece importante: cuando vamos en bici, somos ‘embajadores de la bicicleta’, formamos a ojos de los demás, queramos serlo o no, parte de un colectivo que tiene que mejorar su reputación (parece ser que muchos conductores ven la bici bastante mal, como tuve ocasión de ver). Hacer ver que la bici no es un juguete ni una molestia es importante para contribuir a que nuestra ciudad sea más agradable, más sana, más vivible. Dani hizo su parte diciéndome pacientemente durante toda la mañana ‘los pasos de ceeebraaaaa’ cada vez que me despistaba y me saltaba uno.
Saludos,
Miguel
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