domingo, 19 de febrero de 2012

¿Carmen Lomana en la Bicicrítica?

Con Alaska y Mario Vaquerizo... podría pasar, pero todavía no


A partir del minuto 11:50



Diálogo a partir del minuto 11:50


ESCENA 1
LOCALIZACIÓN: Casa de Mario y Alaska, un salón rosa con muebles barrococós. Cena preparada esperando a diversos invitadas. Suena el teléfono móvil de Mario.

MARIO (cogiendo el móvil): Lomana
ALASKA: Que entren por Libreros
MARIO: ¡Carmen!
CARMEN LOMANA (en modo altavoz): No te lo pierdas, que hay una huelga y cientos de miles de bicicletas...
ALASKA Y MARIO: ¡El día de las bicicletas! ¡Qué pesadas las putas bicicletas, de verdad, ough!
MARIO: Tú no te preocupes cariño, que no hay prisa, mi amor. Te esperamos aquí, ¿vale, cariño?

ESCENA 2
Misma localización, un rato más tarde. Mario abre la puerta para recibir a Carmen Lomana.

CARMEN (entre risas): ¡Por fin, me he librado, me he librado!
MARIO (recibiéndola entre abrazos): De los putos biciclistas esos.
CARMEN (más seria): Oye, yo es que, estos ecológicos que incordian tanto, es que no los aguanto, de verdad.

¿Conseguirá la próxima Bicicrítica convencer a Carmen Lomana de las bondades de la bici?

¿Cómo hacer para que piense en la bici la próxima vez no sólo como un incordio, sino como una posibilidad?

¿Será Carmen Lomana la próxima musa del ciclismo urbano?