Todos los caminos llevan a... Santiago
Esta breve descripción de los
“otros” caminos gallegos detalla aquellas rutas de peregrinación que existen en Galicia al margen del Camino Francés y que quizás son menos conocidos pero no por ello menos importantes.
El Camino del Norte. Los caminos astur-galaicos fueron pioneros en encauzar peregrinos hacia Santiago. Los peregrinos venían desde Francia por mar recalando en los puertos vascos, cántabros y gallegos. Para la entrada de Galicia había diferentes alternativas. Se podía cruzar en barca, de Castropol a Ribadeo o bordear el río Eo que disponía de varios puentes. Estos pasos generaban diferentes itinerarios en dirección a Mondoñedo y Lugo.
El Camino Inglés. La peregrinación jacobea de los pueblos escandinavos, flamencos, ingleses e irlandeses utilizó los caminos del mar para llegar a Ferrol o A Coruña. Estos son los puntos de partida de las dos alternativas del Camino Inglés: la ruta A Coruña-Santiago que cuenta con 74 kilómetros de recorrido, y los tramos Ferrol-Santiago que suman 118 kilómetros.
Camino Primitivo, de Fonsagrada o Astur Galaico. Empleado por los primeros devotos procedentes de Oviedo. Se trata, en rigor, del Camino Primitivo que posiblemente condujo al propio Alfonso II el Casto hasta la tumba del Apóstol en el siglo IX. Este camino fue una ruta segura y frecuentada hasta bien entrado el siglo X, en el que se consolidó el actual Camino Francés.