Según dicho estudio, en el último año ha aumentado un 70% el número de ciclistas. Los seguros y rápidos carriles bidireccionales pintados de azul, junto con la puesta en marcha de un sistema de bicis públicas, serían las causas que han propiciado el que los londinenses opten cada día más por coger la bicicleta en sus desplazamientos urbanos.
El pasado verano abrieron en Londres las dos primeras Cycle Superhighways:
CS3: Barking to Tower Gateway, con 12.07 kilómetros de longitud.
CS7: Merton to City, con 13.7 kilómetros de longitud.
Posteriormente se irán realizando más, para conseguir llegar a las 12 superautopistas ciclistas antes de 2015.
El ayuntamiento de Londres quiere provocar una revolución de la bicicleta en la ciudad, para incrementar el número de ciclistas en un 400 por ciento en 2025.
Las cifras de TfL muestran que el número de ciclistas a lo largo de las dos primeras Superhighways ciclistas de Barclays, se ha incrementado en un 70%, con aumentos del 100% o más en algunos tramos durante las horas punta.