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El acceso cada vez más universal a un Internet en el que todos somos emisores de información permite a los ciudadanos coordinarnos sin necesidad de líderes ni estructuras centralizadas de poder. Es lo que Howard Rheingold llamó Multitudes Inteligentes (Smart Mobs, 2002)
Se contrarresta así el poder de grandes empresas, administraciones y medios de comunicación, que dejan de tener el monopolio sobre los contenidos, al empoderar a los ciudadanos que son capaces hasta de cambiar no pocos gobiernos en la última década.
Como fenómeno reciente, mucha gente todavía ve la Red como un medio para consumir información y no para difundirla o para producirla. Por eso no entienden que las cada vez más frecuentes mareas ciudadanas puedan funcionar sin una jerarquía como la que han tenido hasta ahora sindicatos, partidos, gobiernos y empresas. Buscan líderes y al no encontrarlos caen en teorías de la conspiración: ¿Quién está detrás? ¿Por qué justo ahora? ¿Qué pretenden? Son preguntas recurrentes ante cada nuevo fenómeno de coordinación colectiva.
Y no sólo hablamos de revoluciones políticas. El renacer de la bici como transporte desde 2006 está sucediendo en países sin crisis, o incluso bajo gobiernos que no apuestan por su uso. Posiblemente, los ciudadanos organizados en red tengan parte de culpa.
Explicaremos cómo funcionan las nuevas Multitudes Inteligentes usando como ejemplo la promoción de la bici con experiencias que hemos vivido en primera persona desde este blog. Son tres maneras que tenemos los ciudadanos para coordinarnos ante la Administración Pública: colaborando con ella, suplantándola y combatiéndola.
El acceso cada vez más universal a un Internet en el que todos somos emisores de información permite a los ciudadanos coordinarnos sin necesidad de líderes ni estructuras centralizadas de poder. Es lo que Howard Rheingold llamó Multitudes Inteligentes (Smart Mobs, 2002)
Se contrarresta así el poder de grandes empresas, administraciones y medios de comunicación, que dejan de tener el monopolio sobre los contenidos, al empoderar a los ciudadanos que son capaces hasta de cambiar no pocos gobiernos en la última década.
Como fenómeno reciente, mucha gente todavía ve la Red como un medio para consumir información y no para difundirla o para producirla. Por eso no entienden que las cada vez más frecuentes mareas ciudadanas puedan funcionar sin una jerarquía como la que han tenido hasta ahora sindicatos, partidos, gobiernos y empresas. Buscan líderes y al no encontrarlos caen en teorías de la conspiración: ¿Quién está detrás? ¿Por qué justo ahora? ¿Qué pretenden? Son preguntas recurrentes ante cada nuevo fenómeno de coordinación colectiva.

Y no sólo hablamos de revoluciones políticas. El renacer de la bici como transporte desde 2006 está sucediendo en países sin crisis, o incluso bajo gobiernos que no apuestan por su uso. Posiblemente, los ciudadanos organizados en red tengan parte de culpa.
Explicaremos cómo funcionan las nuevas Multitudes Inteligentes usando como ejemplo la promoción de la bici con experiencias que hemos vivido en primera persona desde este blog. Son tres maneras que tenemos los ciudadanos para coordinarnos ante la Administración Pública: colaborando con ella, suplantándola y combatiéndola.