La temperatura era perfecta, no sé cuanto es eso pero era un fresquito muy agradable para ir en manga corta, pantalón corto y zapatos náuticos. MiguelS y Aalto llegaron con Marta, puntuales como un reloj, al segundo punto de la cita, al que llegaba yo en ese momento e inmediatamente Maria Eugenia.
Lo primero presentarnos nosotros y nuestras respectivas bicis, un completo mix de bicis, carreras, montaña, urbanas y una interesante plegable de montaña que calzaba MiguelS. Unos consejos básicos de seguridad y buenas costumbres y salimos.
¡Que calles más tranquilas son las calles tranquilas un domingo por la mañana!. Se puede ir de paseo charlando desde Quevedo hasta plaza de Castilla y a una velocidad bastante buena sin prácticamente ningún coche. Y los que vimos, todos a una distancia adecuada. Lógicamente el Lunes será otra cosa, pero son calles muy recomendables, nada que ver con Bravo Murillo u otra por el estilo.