Los mountainbiqueros somos unos amantes de la naturaleza algo peculiares – nos encanta hacer deporte, pero no siempre delante de la puerta de nuestra casa. Para practicar nuestro deporte tenemos que salir al bosque, al monte, salir de la ciudad – bueno, es algo que nos une con todos los amantes de los deportes de montaña. También es debido al hecho de que pocas ciudades están en medio de los montes y aún menos montañas en medio de las ciudades.
Para solver este problema hacemos uso del mejor amigo del Alemán (y del Español también) citando una publicidad: "Das Auto". Por un lado es comprensible, por el otro nos duele: Comprensible, porque solo el coche nos lleva de forma rápida y confortable de la puerta de nuestra casa hasta nuestro destino gracias al gran maletero en el que cabe nuestro equipamiento. Por el otro lado nos duele, porque pasamos mucho tiempo pegados al volante en vez de al manillar de nuestras bicis y contaminamos la naturaleza que tanto nos gusta con los gases del tubo de escape de nuestro coche, produciendo ruido y haciendo que esa naturaleza sea un poco menos originaria.
A muchos no les gusta ir en coche, menos pensando el los atascos, los peajes o el lio de meter las bicis dentro del coche y limpiarlo después - y aún así casi casi todos lo hacemos. Tampoco es de estrañar mirando las alternativas: Usando el transporte público? Muchas veces la pagina de bahn.de (la Renfe alemana) nos indica tiempos de viaje de 4 horas donde llegamos en dos con el coche o tenemos que hacer tres trasbordos o simplemente nos dice: "No hay conexiones para su destino".