Para evitar este problema, y según el modelo de teléfono que lleves, podrás cambiar la batería a mitad de trayecto, o tendrás que recurrir a una batería externa. Hay otras soluciones como poner un cargador-dinamo en la bici, o como hace alguno de mis compañeros, llevar una mochila con un panel solar (aunque no sé cómo funcionará en días nublados).
Os voy a mostrar tres baterías externas, muy económicas y que pueden ayudarnos en nuestras rutas para evitar que volvamos a quedarnos tirados:
