La idea en papel parecía buena: Un aparcabicis de pago cerrado y vigilado en el intercambiador de Plaza Castilla, ideal si vivo en Madrid y uso los interurbanos a diario para ir a Tres Cantos o Alcobendas a trabajar. De esa manera me ahorro el trayecto en metro y ya no necesito abono de 30 días, que es más caro que comprar sólo billetes de interurbano.

Que esta intermodalidad tiene demanda lo muestra el aparcabicis que instaló el Consorcio en la calle, que se debe ampliar sólo unos meses después de su instalación.

Que esta intermodalidad tiene demanda lo muestra el aparcabicis que instaló el Consorcio en la calle, que se debe ampliar sólo unos meses después de su instalación.



Hace unos días nos escribió Victoria, pidiendo ayuda. Hace 10 meses se mudó a Madrid desde Buenos Aires, donde se movía en bici habitualmente y ha querido conservar ese medio de transporte aquí también. Sin embargo, google no le ayuda y le ha recomendado usar Princesa y Alcalá para llegar desde Moncloa (donde vive) hasta Julián Camarillo (donde trabaja).

