Numerosas bicicletas de lujo inundan las calles de las ciudades chinas. Suena extraño oír la palabra lujo cuando hablamos de bicicletas, después de que durante años haya sido un modo humilde de desplazarse por las calles de la ciudades del país asiático.
Pero a medida que la segunda economía mundial se abrió al comercio exterior, la demanda de coches de lujo creció y trajo de la mano el creciente interés de aquellos que en vez de poseer un automóvil prefirieron seguir desplazándose en bici, eso sí, sin quedarse atrás y hacer ver su elevado estatus por tener una bicicleta de lujo.
Algunas de las compañías más importantes del mundo están compitiendo por ingresar en el creciente mercado de las bicicletas de lujo en China. Un ejemplo es el de una compañía británica conocida por sus bicicletas plegables que ha abierto su primera tienda en China. Una bicicleta allí puede costar unos 2.000 dólares (1.500 euros), una suma que alcanza lo que pueden ganar la mayoría de los chinos en un año.
Llegamos a un punto en que pese a los orígenes humildes de la bicicleta en el gigante asiático, el ciclismo podría convertirse en un estilo de vida de los ricos de China.