El Plan General de Ordenación (PGO) obligará a las nuevas edificaciones a incorporar un área para el descanso de los ciclos. Actualmente, explicó el concejal de Urbanismo, Pedro Sanjurjo, los usuarios no saben muy bien qué hacer con las bicicletas. Unos las abandonan en el portal, otros las suben a cuestas por la escalera y algunos las introducen en sus viviendas tras realizar verdaderos ejercicios de encaje para colarlas en el ascensor.
El problema acabará con la nueva normativa. El ayuntamiento permitirá que esta suerte de cocheras ciclistas no computen como superficie edificable, por lo que las promotoras no perderán edificabilidad con su construcción, que se desarrollará, prioritariamente, en las plantas bajas.
El objetivo primordial del equipo de gobierno es potenciar una movilidad encabezada por los peatones, seguida por los transportes públicos, los medios "alternativos" y, en último lugar, los vehículos. Para ello, Gijón cuenta con 30 kilómetros de carril bici en la zona urbana y otros 60 a lo largo de las sendas verdes. Alcanzar Cabueñes pedaleando desde El Arbeyal es posible a falta de la culminación del nudo del Piles que al término de este año ya habrá concluido.