Personalmente no tengo claro cual de ambas es la correcta, o si ante la difícil tarea de ir modificando el comportamiento de los conductores, las vías segregadas puedan ser una solución transitoria, pero necesaria, para que los ciudadanos nos vayamos atreviendo y acostumbrando a movernos en bici y lleguemos a constituir la masa crítica que reduzca el volumen de tráfico, genere conciencia, y suponga una demanda imparable para tomar las medidas finales adecuadas.
Y una vez abierto el debate, me pongo en el lugar de los concejales de movilidad y urbanismo que tratan de imaginar cuál será la mejor solución. Y diría yo: ¿ qué tal si tomamos ventaja y adoptamos el modelo de alguna ciudad en la que el tráfico sobre dos ruedas ya esté implantado y "triunfe" ? Vamos a tomar por ejemplo la ciudad europea con uno de las mayores proporciones entre tráfico de bicis y motorizado, si no el mayor: Copenhague. Un viajecito de los técnicos y concejales implicados por aquellas tierras quizá les ahorrara a ellos, y a todos nosotros, más de un quebradero de cabeza, de presupuesto, y de comodidad y seguridad.
Ante todo, tolerancia, prudencia y concienciación: los coches respetan al ciclista y a la señalización correspondiente (así como los ciclistas a los peatones). Esto es educación, básicamente, pero no sería suficiente si no existieran infraestructuras y señalizaciones que respetar, que posibilitan y ordenan esta convivencia. La ciudad reserva espacios para los tres "sectores": coches, bicis, y peatones.
En las calles pequeñas, de aceras estrechas, velocidad reducida y las bicis comparten el espacio con el resto del tráfico rodado.
En cualquier otra calle algo mayor, avenidas, y carreteras (!!), la circulación de bicis discurre paralela al resto de circulación y está bastante segregada tanto del tráfico motorizado, como de los peatones, y aún en los puntos conflictivos (cruces, glorietas, etc), donde a la fuerza se deben cruzar las distintas calzadas, la vía ciclista está señalizada y separada.
Pongo a continuación algunos ejemplos:
Para terminar, un detalle: además de encontrarte bicis aparcadas por todos lados, hay aparcamientos públicos, por supuesto techados, a la entrada de las estaciones.
Seguro, y muy fácil de aprender.
garedagmad