Una vía ciclista es un vía de circulación exclusiva de ciclos, es decir aquella por la que no puede circular ningún otro tipo de vehículo que no sea un ciclo: bicicletas, triciclos cuatriciclos...
Tradicionalmente se ha considerado que este derecho es a la vez obligación, de modo que cuando existe, no se permite la circulación a los ciclos por cualquier otra vía/carril adyacente a la misma y para indicarlo se ha establecido la señal R-407a en el código de la circulación.
Así ocurre
en países europeos considerados mayoritariamente como mas avanzados en movilidad ciclista como Alemania o Dinamarca, donde
está legalmente prohibida la circulación fuera del carril bici en los tramos donde este existe, siendo su infracción estrictamente sancionada.
Actualmente existe en España una corriente dentro del sector de la movilidad de ir restaurando poco a poco los derechos que las bicicletas perdieron antaño en favor de los vehículos motorizados, y por ello se empieza a ver con buenos ojos que las vías ciclistas dejen de ser obligatorias y las bicis puedan elegir por donde circular.