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viernes, 28 de enero de 2011

Alcalde, quiero una bici

Vender la capital catalana como el paraíso de la bici nos está saliendo por un ojo de la cara

Artículo sobre el Bicing de Barcelona escrito por Francesc - Marc Álvaro para lavanguardia.es

Alcalde, quiero una biciAdemás de haberse convertido en un peligro público para los peatones, ahora tenemos constancia de que el servicio del bicing implantado en Barcelona es terriblemente caro y sus teóricos beneficios no están demasiado claros.

Lo explicaba hace unos días en estas páginas el economista Guillem López Casasnovas, quien, de paso, recordaba que, durante el año pasado, el bicing ha representado un coste de 18 millones de euros y unos ingresos de sólo 3 millones. Este déficit de 15 millones, que deben absorber las arcas municipales, es la metáfora contundente del tipo de política falsamente innovadora que todas las administraciones públicas y todos los partidos desarrollaron cuando parecía que el tiempo de vacas gordas sería eterno. Llamen a esta manera de gobernar como quieran: alegría, frivolidad o irresponsabilidad.

Vender la capital catalana como el paraíso de la bici nos está saliendo por un ojo de la cara. Si se trata de ser simpáticos y populistas, sería mucho más barato subvencionar bicicletas (o patinetes, ya puestos) al personal.

Hablamos a todas horas de la imperiosa necesidad de dar a las políticas de I+D+i el lugar que les corresponde para crear nuevas actividades económicas de valor añadido, pero parecemos más duchos a la hora de importar o adaptar inventos que buscan únicamente un golpe de efecto. La estética, no obstante, no nos pierde únicamente a los catalanes, no se crean. Las autoridades de la Unión Europea se han cubierto de gloria con el malhadado proyecto Galileo, creado en el año 2002 para competir con el GPS estadounidense. El invento en cuestión –que debía ser la caraba– no estará a punto para el 2014 y, por ahora, su coste de ejecución se acerca a los 5.300 millones de euros, mientras la industria privada se retira de la aventura. Así las cosas, toda la financiación recaería sobre el erario de los estados miembros, que no están para este tipo de inversiones. La sinceridad de un ejecutivo alemán implicado en el asunto fue filtrada por Wikileaks y es demoledora: “Es una idea estúpida que sirve principalmente a intereses franceses”.

De ideas estúpidas o muy discutibles han ido los presupuestos oficiales bastante cargados durante estos últimos años. Con el viento económico a favor, nada parecía lo bastante absurdo ni lo bastante caro. De eso saben mucho los profesionales de vender motos a los ministros, consellers y concejales de turno, personajes que han hecho su agosto hasta la irrupción de la crisis, explotando con habilidad el natural afán del gobernante de representar de la manera más efectista e inmediata posible su preocupación por la gente. Pero, contrariamente a lo que se repite a modo de oración expiatoria desde todos los gobiernos, la solución a estos males no está en la austeridad (que debería ser norma), sino en el sentido común y, sobre todo, en el sentido del ridículo.

Hemos escrito anteriormente: ¿Os gustaría tener Bicing en Madrid?,
Mapa de la Red de carriles bici de Barcelona, El Bicing pierde el 38% de abonados

9 comentarios :

  1. Sí, el bicing es malísimo. Seguro que cuando llegue Convergencia lo quita y lo suatituye por... ¿1000 líneas de Metro?. En fin "La vanguardia", en su línea.

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  2. He aquí un 'liberal' en el mal sentido de la palabra. Si no da benefícios económicos, no sirve. A ver si alguien se anima a 'contabilizar' la mejora en la calidad de vida de los barceloneses desde que se implantó la bici como medio de transporte. Y no se olviden que estas cosas sí dan votos

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  3. La Vanguardia, ese defensor a ultranza del ciclismo urbano...

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  4. Mientras no se controle con lupa el dinero público y se proteja de las zarpas de los políticos, en España nunca nada será rentable: ¿18 millones, según mi calculadora 2.995.000.000 de pelas, cuesta un bicing????

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  5. Como ha dicho Rafa ya estamos con la falacia liberalista de que como no es rentable habría que retirarlo, aunque sea un servicio público al ciudadano. Pues nada, retiremos el sistema educativo, el sanitario y el de investigación científica que tampoco son rentables, hagamos solo autopistas (de peaje, claro. ¡ah! y gestionadas por una empresa privada, por suspuesto...)

    Y a todo esto, y parafraseando a nuestra bienamada concejala madrileña de medio ambiente: ¿qué tienen que ver las peras con las manzanas? ¿a qué viene comparar el Bicing con la red Galileo (lo mismito, lo mismito)? ¿y a este hombre le pagan por escribir columnas?

    Y ya que hablamos de la supuesta inutilidad de Galileo, creo que merece la pena recordar que el sistema GPS se está acercando al final de su vida útil, y que de hecho, de 30 satélites que debieran estar desplegados, sólo hay operativos 22 (creo recordar). Si cayera uno más empezaría a haber zonas de la tierra cubiertas por solo 2 satélites, lo que haría que de súbito la precisión cayera a +/- decenas de metros y no se dispusiera de datos de altitud. Y dado que los trasbordadores de la NASA se retiran del servicio ya no hay forma de repararlos... Pero en fin: es mucho más fácil hacer uso de la demagogia de los 5000 millones de euros y no del negocio que podría hacerse con las licencias para los receptores de satélites.

    Pues a mí me gustan tanto las peras como las manzanas, la verdad...

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  6. Los servicios públicos, no tienen por qué ser económicamente rentables, pero sí desde otros puntos de vista. Por ejemplo, en este caso, debemos de contabilizar otros beneficios:
    * Servicio que se presta al ciudadano
    * Imagen de la ciudad hacia el exterior e interior (ciudad moderna, concienciada con sus ciudadanos, ...)
    * Reducción de contaminación.
    * Disminución de tráfico y mayor fluidez en la ciudad.
    * Mejora en la salud de los que usan la bici, con la repercusión de este factor en la sanidad pública.

    En cualquier caso, si calcularamos el coste de todos estos puntos, igual nos dieramos cuenta de que sí que es muy rentable.

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  7. Este podría ser un beneficio del uso de la bici para Gallardon:

    http://www.elpais.com/articulo/sociedad/fiscal/tumba/ardid/Gallardon/enmascarar/contaminacion/elpepisoc/20110129elpepisoc_4/Tes
    El fiscal tumba el ardid de Gallardón para enmascarar la contaminación

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  8. Tres veces seguidas el mismo enlace, anda que estáis pesaditos !!!

    Sin querer entrar a valorar su contenido, ni de que ideología política es ese fiscal, ni si se debe a una campaña política que ha iniciado ese Medio hace unas semanas contra Gallardón-Botella, creo que este blog es de bicis, aquí hablamos de bicis, y si queréis discutir de política hay muuuuchos sitios donde podéis hacerlo.

    :) :) ;)

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  9. Yo estoy contento con el servicio y creo que es el que mejor está funcionando de todos los servicios de préstamo de bicicletas, somos el modelo a seguir por otras ciudades que quieren implantarlo.

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