Invita a una cañaRuta de Montecarmelo a las Cuatro Torres - sábado 22 octubre
Escrito el 25 de octubre por José
Supongo que como les pasa a muchos, yo me encontré con En Bici por Madrid por casualidad. Hace un año me acababa de mudar a Montecarmelo, y con una bici nueva en el garaje empecé a buscar información de a dónde llegaba el carril bici ese que pasaba por la puerta de mi casa. Así encontré un artículo que hablaba de la conexión del Anillo verde y el carril bici de Colmenar y me fue de mucha ayuda.
El Blog estaba orientado sobre todo a ciclismo urbano, pero se hablaba un poco de todo y de vez en cuando publicaban Rutas por la Sierra o por El Pardo con mucho detalle que a un novato como yo le venían muy bien. De manera que me acostumbré a entrar habitualmente para ver las nuevas entradas, y así me enteré de lo que era la Bicicrítica, de las diferentes posturas entre defensores y detractores del carril bici, y lo más importante, me di cuenta que había mucha gente en la ciudad que usaba su bicicleta como medio de transporte a diario, y que además había un grupo de gente que prestaba ayuda de manera voluntaria y desinteresada con la iniciativa de los Bicifindes.
Desgraciadamente, con mi ruta de trabajo habitual (Montecarmelo-Pozuelo) ni se me pasaba la cabeza ir en bicicleta al trabajo, y me tenía que conformar con mirar desde la ventanilla del bus a los afortunados que iban cada mañana dando pedales... Hasta que hace bien poco me comunicaron que cambiaba mi lugar de trabajo a una de las Cuatro Torres, y creo que esa misma noche estaba enviando un correo a bicifindes@espormadrid.es
No habían pasado ni 10 días y ya tenía respuesta de Aalto para empezar a preparar la ruta (día más adecuado, hora, etc.) Después de cruzar unos cuantos mails, ya tenía día D, que resultó ser el sábado pasado. A las 9 de la mañana ya estaba esperándome Aalto en la puerta de mi casa, y para empezar me sorprendió que nada de bici urbana, ruedas gordas y con tacos como las mías.
Lo primero fueron unas nociones básicas de circulación (más necesarias en mi caso ya que no tengo carnet de conducir) y que creo que todo el mundo habrá escuchado alguna vez: somos un vehículo más y como tal deberíamos comportarnos, los stops son obligatorios, y los semáforos en rojo también, hay que ocupar el centro de tu carril, señalizar bien los giros, y hacernos ver adecuadamente con luces delanteras y traseras cuando sea necesario.
Una vez puestos en marcha, la ida se me hizo muy corta, cruzamos Montecarmelo, el barrio de Fuencarral, pasamos por Herrera Oria, veo el hospital Ramon y Cajal y el de la Paz... y ya hemos llegado. 24 minutos a buen ritmo con un perfil que pica hacia arriba, pero que se puede hacer sin ningún problema.
Delante de la torre, Aalto me hace un master rápido de cómo candar la bici de manera segura y nos ponemos en marcha para la vuelta. Todo lo que antes habíamos subido ahora es bajada, así que en un pis pas estamos otra vez en la puerta de mi casa (según el GPS hemos tardado 21 minutos a casi 14 km/h de media).
Ha sido un paseo de lo más agradable por calles muy tranquilas, en todo el camino solo un coche se ha impacientado (y tampoco supone mayor problema, cuando pudimos le dejamos espacio para adelantarnos y ya) y desde luego es adecuado para hacerlo a diario. Acabamos la jornada comentando las mejores rutas de MTB por la sierra que hemos hecho cada uno (ya sé que precisamente no vais sobrados de tiempo, pero reitero mi petición de que volváis a publicar las rutas que hacéis).
Solo me queda agradeceros la ayuda para dar un paso hacia una vida más agradable. Hace años vivía en Holanda y podía ir a la Universidad cada día en bici, era algo que me encantaba y me hacía empezar el día de otra manera, y una válvula de escape a la vuelta para airearme. Si a esto añadimos que Madrid necesita menos coches circulando para que sea una ciudad más amigable y con menos contaminación está claro que cuantos más seamos en bici mejor para todos.
Si tú también quieres ir en bici por Madrid, escribe a bicifindes@espormadrid.es
