La ciudad conecta su discontinua red y la amplía para impulsar su uso
Rosa Biot, Alicante, para El País
Alicante es una ciudad de grandes desniveles, no tiene cultura de bicicleta y hay quien opina que el calor también es un inconveniente, durante muchos meses, a la hora de usar este medio de transporte. Pero
el Ayuntamiento de Alicante considera que son "prejuicios" más que dificultades reales, aunque admite que el uso de la bicicleta es mínimo. Este año se ha sumado a la tendencia existente a nivel nacional de apostar por este transporte alternativo y está realizando obras en distintos puntos para conectar su discontinua red ciclista -y de paso solventar numerosos problemas de desniveles, pavimentos en mal estado o intersecciones inseguras- y ampliarla. El objetivo es que los 62 kilómetros inconexos de red ciclista se conviertan en 94 kilómetros a principios de 2011 y alcanzar los 147 kilómetros en el horizonte 2013.
La primera fase de esta red básica supondrá una inversión de 1,8 millones de euros con la intención de
crear una infraestructura que genere demanda para potenciar la bicicleta como medio de transporte cotidiano, esgrimió ayer Javier Cobela, jefe del departamento técnico de Planificación Viaria y Movilidad Sostenible del Ayuntamiento.
La creación de esta red se ha apoyado en buena parte en los fondos del Plan E. Las obras empezaron el pasado mes de julio y se han centrado en distintos puntos de la ciudad, con varias fórmulas, según permite la zona. En algunas calles se ha instalado un
carril bici, donde la bicicleta y el vehículo comparten rasante pero tienen su propio espacio reservado. En otras se ha apostado por la
"acera bici", para lo cual se ha reservado un espacio en una acera ya existente o, si no hay suficiente espacio, se ha ampliado. La tercera opción es la
ciclocalle,
"tipología novedosa en la ciudad, no en Valencia o Sant Vicent del Raspeig", puntualizó Cobela. Esta fórmula señaliza el centro de una calle de bajo tráfico para permitir el uso ciclista. La cuarta fórmula es la
"pista bici", que marca un carril completamente segregado para este transporte. A esta última fórmula pertenece la pista ciclista entre el centro de Alicante y la Universidad de Alicante: seis kilómetros que el lunes serán bautizados con el nombre de Miguel Induráin. El pentacampeón del Tour de Francia reivindicó en octubre de 1993 el circuito que el lunes inaugura con una marcha en bicicleta entre la Universidad y el Ayuntamiento. El equipo de gobierno del PP destacó durante la presentación el impacto que sobre el transporte universitario puede tener esta infraestructura.