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martes, 26 de julio de 2022

Como reparar unos radios arrancados de la llanta. Consecuencias de un palo en la rueda

Ahora que siempre vengo de vacaciones a Asturias con la bici, tengo la mala costumbre de preparar averías importantes.


A mi pobre Orbea le he tenido que cambiar un montón de cosas por desgaste y eso está muy bien, pero estando de vacaciones el año pasado, no esperaba tener que cambiar la tija del sillín, el núcleo del piñón y la horquilla.

Este año la avería por un palo en la rueda ha sido más moderada y tenía tres opciones:

  1. Reparación doméstica vacacional, con pocas herramientas.
  2. Seguir como si nada hasta que reventase y aplicar la opción 3
  3. Sustitución de rueda trasera, con buje y llanta.

He conseguido elegir la primera. 

Os cuento la avería y la solución, que creo que es algo que a cualquiera os puede pasar.

El culpable: Un palo en la rueda de los p. Eucaliptos.

En Asturias hay bosques muy bonitos, con sus hayas, robles, castaños, avellanos... y hay bosques de cartón piedra. Parecen bosques, pero son cultivos de eucaliptos, con uso industrial y un riesgo de incendio del carajo. Yo iba por uno de estos. Una de las cosas que tienen es, además de hojas de eucalipto por el suelo, palos. Suele haber muchos palos por los caminos. Palos rectos, fuertes y largos. Si vas rápido por uno de esos caminos hay que tener mucho cuidado de que no se metan entre los radios o por otro lado. Yo iba con cuidado, pero no el suficiente. Iba rápido y, de repente, noté un golpe fuerte por la parte trasera de la bici.  Paré, miré un poco y como todo seguía funcionando aparentemente bien, seguí bajando.

No me di cuenta de que había arrancado dos radios de la llanta. Sin romper los radios y sin destrozar la llanta. Seguí bajando y haciendo mi ruta durante un par de horas más. La bici parecía ir bien.

Hasta que noté el típico tic-tic al ritmo de giro de la rueda y lo miré mejor. Había dos radios sueltos. Enteros pero doblados. Uno conservaba la cabecilla, el otro tenía toda la rosca al aire y otro más estaba un poco doblado. Vaya avería fea. 



¿Opción 2 y seguir hasta que reviente?

No me veo bajando los Lagos con una rueda que no vaya bien. Y si tuviese que cambiar la llanta (opción 3), me temo que me quedaría sin bici los días que quedan de vacaciones.

Tenía que intentar reparar. Opción 1, por supuesto.

Lo recuperable y lo (poco) nuevo:

La llanta es una mavic Xm 119, de alumino y con doble pared. Creo que se ha portado fantásticamente bien en todos los años que llevo con ella y en esta avería solo se ha roto un poco uno de los agujeros que sujetan los radios y otro que se ha dado de sí. Recuperable al 100%. Si tuviera que cambiarla (opción 3) tendría que cambiar el buje con el que está montada y no se muy bien lo que haría con el núcleo o el eje. Un lío. Sería la típica opción normal (correctísima) para un taller.

Los radios. Los únicos que he roto en un montón de años son los que tuve que romper yo cuando no conseguí mover algunas cabecillas ajustando el aparaguado. Los dos salidos están un poco torcidos, pero se enderezan inmediatamente. Además, como son dos radios seguidos, si quisiese cambiarlos, uno de ellos me obligaría a desmontar el disco y otro el piñón. No tengo herramientas, ganas ni necesidad. Recuperables al 100%

Lo único que me faltaba era la cabecilla de un radio y Dani, de Danibikes, de Ribadesella, me ha regalado unas. Gracias mil! No sabes cuánto me ha resuelto una pieza tan pequeña!.

La reparación: 

Una vez que se ha dado de sí el agujero de la llanta, hay que poner algo para que la cabecilla no se vuelva a salir. Algo como una arandela. La pieza que he encontrado y ha funcionado a la perfección ha sido una especie de alcayata circular. Una hembrilla cerrada. 

Primero la he ajustado a la cabecilla con unos alicates y he cortado el sobrante con unas tenazas. Quedaba como una arandela bien apretada y de contornos suaves. 


Luego he metido la cabecilla con su nueva arandela por el agujero del lado de la cámara, abriendo antes un agujero en la cinta azul pegada al fondo de la llanta. No es inmediato de colocar y si se cuela la cabecilla o la arandela entre las dos paredes de la llanta, se puede liar un poco todo. Me he ayudado del tubito de plástico rojo del spray de aceite. 


Si se te cuela la cabecilla entre las dos paredes de la llanta, usa el agujero de la válvula para sacarla, que es más grande.

Una vez colocadas las cabecillas, los radios (enderezados) se roscaban bien. He engrasado bien todas las cabecillas y he repasado el centrado. Hacía mucho que no tenía la rueda centrada tan fina. Ha venido bien.

Antes de montar cámara y cubierta, he tapado los agujeros de las cabecillas, pero como no tenía cinta buena de fondo de llanta, he tenido que poner cinta aislante. Para evitar que la cámara empuje demasiado la cinta y acabe reventando, he puesto un pequeño trozo de plástico de botella de acuarius que se ve en la foto. De eso sí que tenía aquí y parece que va bien.


Por cierto, al montar de nuevo la cubierta trasera, he comprobado que en esta cubierta y con ese dibujo, recomiendan ponerla en sentidos diferentes para la rueda delantera o en la rueda trasera. ¿Sabéis por qué? (Javi, esto es lo que te comenté...)


Resultado.

Tras una avería fea que me ha podido costar una rueda completa, he pasado un rato muy interesante con un arreglo que no había hecho nunca y que no me ha costado nada de dinero. La bici está mejor alineada que antes y he tenido una excusa para otro artículo de mecanica bicicletera en vacaciones. ¿Qué más se puede pedir?

Pasadlo bien!

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