Cuando publiqué la convocatoria había avisado que iba a ser "una ruta muy dura, con muchas cuestas, toboganes, trialeras, senderos estrechos..." pero a pesar de ello, y de la adversa climatología, el pasado sábado 20 de octubre nos juntamos 14 ciclistas para recorrer una de las rutas más duras que habíamos realizado hasta ahora. Una vez más superamos la prueba con éxito, y ya estamos pensando en la siguiente aventura, que seguro será más dura y más espectacular que todas las anteriores. Enhorabuena a todos mis compañeros de ruta.
- Datos de la ruta -
Fecha: Sábado 20 de octubre de 2012Origen: Estación de Cercanías de Colmenar Viejo
Destino: Estación de Cercanías de Tres Cantos
Distancia: 29.95 km
Hora de inicio: 9:04 - Hora finalización: 14:49
Duración: 5 horas y 45 minutos
Velocidad media: 5.20 km/h
Desnivel subida acumulado: 740 m
Dificultad: alta (algunos tramos a pie empujando la bici)
Otros datos: No hay fuentes en el camino. Hay que vadear un arroyo - Ver ruta en RunKeeper - Descargar ruta en formato .GPX y .KML
(Los datos son de la ruta que realizamos el sábado, pero tuve un problema al grabar el mapa y he puesto el que realicé la semana anterior)
Dicen que "una imagen vale más que mil palabras", y como en este caso tenemos muchas imágenes que mostrar (gracias, Baldo), intentaré ser breve en el relato de la ruta... ya veremos si lo consigo.
Como en muchas de nuestras rutas de montaña, en esta ocasión íbamos a utilizar el Cercanías para acercarnos hasta el punto de origen de nuestro pedaleo. El sábado 20 de octubre, a las 9:00 de la mañana, y con un tiempo que amenazaba lluvia, llegábamos a la estación de Colmenar Viejo. Allí nos juntábamos 14 ciclistas: Álvaro, Ángel, Antonio, Baldo, Daniel Olivares, Daniel Urós, David, Ghota, Javi, JJfet, Mauro, Navalex, Shinyeva, y Wheels.
La salida de la Estación tiene unas buenas rampas, y para ir entrando en calor empecé a tirar fuerte del grupo desde el principio. Nos reagrupamos en la glorieta del helicóptero, y volvimos a hacerlo en una glorieta de la ronda Oeste, en la que giraríamos hacia los caminos de arena para abandonar las calles de Colmenar Viejo.
Al empezar el camino, una pequeña charla para contar al grupo algunas notas sobre la ruta que íbamos a recorrer, los caminos que antiguamente usaban los lugareños para acercarse al río Manzanares y acceder a los molinos y batanes. Empezaríamos por el "Camino bajo de Cerceda" también conocido como "Colada de los Gallegos" (que ahora es parte del Camino de Santiago), para posteriormente recorrer los senderos que discurren siguiendo el cauce del río Manzanares.
Ángel empieza a notar que tiene roto el amortiguador de la bici, y unos kilómetros después decide abandonar la ruta y volver a Colmenar Viejo. Una lástima, pero seguro que este fin de semana se aventura a hacer la ruta completa, aunque sea en solitario.
Este primer tramo, que ya hemos hecho en varias de nuestras rutas en ambos sentidos, nosotros lo conocemos como "las trialeras de Colmenar". En este caso además lo haríamos en la buena dirección, con muchos tramos en bajada y muy poca subida. Es un tramo técnico, con bajadas muy rápidas, muchas piedras, pero que todos vamos haciendo a nuestro ritmo. Eso sí, a Baldo, Javi y Shinyeva les dejamos que vayan tirando delante que ellos van más rápidos.
Antes de darnos cuenta hemos acabado el primer tramo de trialeras, y ya estamos en el Puente del Batán.
El Puente del Batán es de un solo arco de medio punto, de piedra de granito, de 10,5 m de luz y casi 4 de ancho. Está cimentado directamente en la roca y tendido en la parte más estrecha de la garganta excavada por el río Manzanares. Aunque la tradición le atribuye un origen romano, el puente fue erigido en la Edad Media, y toma su nombre de un antiguo batán existente aguas arriba. Antiguamente era el único punto por el que podía cruzarse el abismo y lo utilizaban tanto los pastores para cruzar con su ganado, como comerciantes y viajeros.
Tras las explicaciones y fotos de rigor, continuamos nuestra ruta por los senderos que siguen el cauce del río Manzanares por su margen izquierda.
Los senderos son estrechos y sinuosos, con continuas subidas y bajadas. Empezamos rápido, pero poco a poco vamos bajando el ritmo y poniendo pie a tierra cuando las subidas se empinan mucho.
Vamos parando cada cierto tiempo a esperar a los que van más rezagados, con lo que aprovechamos para descansar, charlar un rato, y algunos, incluso para fumarse un cigarrillo... o dos.
Pasamos la Central hidroeléctrica de Navallar (que todavía está en funcionamiento con el agua de dos grandes tuberías provenientes del embalse de Santillana), y empezamos a circular por una amplia pista sobre las tuberías del Canal. Se acabaron las cuestas... de momento.
Aparece el primer paso estrecho, que salvamos por una pasarela de madera con escalones. Aquí no queda otra que bajarse de la bici.
Unos metros más adelante encontraríamos el segundo paso, y más estrecho todavía, tanto, que hay que pasar ayudándose de una cuerda anclada en la pared de roca. Aquí unos prefieren cargar la bici a cuestas, otros empujando... incluso algún valiente decía que podía hacerse sobre la bici.
Seguimos rodando por el camino, y empezamos a ver a nuestra derecha el río Manzanares en un valle muy verde. Pensamos que debe ser un gustazo pasar por aquí en verano y darse un chapuzón en alguna de las pozas, pero ahora ya vamos bastante mojados con el agua que nos va cayendo encima.
Unos metros más, y llegamos a la Presa del Grajal, una infraestructura hidráulica inaugurada en 1908 por Alfonso XIII, y levantada sobre el río Manzanares como parte de las infraestructuras proyectadas por el marqués de Santillana. Actualmente tiene las compuertas abiertas y no está en funcionamiento porque el caudal del Manzanares está controlado aguas arriba la presa del embalse de Santillana, que entró en servicio en 1907, y fue ampliada en 1969.
Siguiendo nuestro camino llegamos al Puente del Grajal, un puente medieval como el del Batán, aunque en este caso sus medidas de "6 codos" hacen pensar que está realizado un siglo antes (entre los siglos IX y XI) y en zona musulmana. El puente del Batán se piensa que fue levantado tras la conquista cristiana.
El Puente del Grajal está construido enteramente en piedra de granito. Se sostiene sobre un arco de medio punto, de 10 m de luz. El ancho de su tablero es de 3,34 m. y conserva el pavimento original de grandes losas de piedra ubicadas en un perfil típico de ‘lomo de asno’.
Pegado a él, aguas abajo, se alza otro puente, construido en 1895 para facilitar la circulación de vehículos por la carretera M-618 que va de Colmenar Viejo a Hoyo de Manzanares.
Los siguientes kilómetros iban a ser muy tranquilos, rodando por el camino que va sobre las tuberías del Canal. Después de las subidas y bajadas que llevábamos, aquello parecía un carril bici.
En esta zona paramos en varas ocasiones para ver los molinos que utilizaban la fuerza del agua para moler el grano. Pudimos ver los canales que conducían el agua del río Manzanares, captada aguas arriba, y que la dirigían a grandes pozos o cubos desde los que por la presión conseguían mover las piedras.
También pudimos ver los batanes, que con un mecanismo similar, con la fuerza de la corriente de agua hacían mover los mazos que posteriormente golpeaban los tejidos hasta compactarlos.
Estos molinos y batanes estuvieron en funcionamiento hasta que a principios del XIX Alfonso XIII y el Marqués de Santillana construyeron las presas y disminuyó drásticamente el caudal del río Manzanares.
Seguimos por el camino en fila india, con precaución porque a nuestra derecha tenemos un cortado de bastante altura. En algunas zonas está protegido por barreras.
Por si alguien se anima a hacer la ruta en solitario, y sin GPS, hay un momento en el que se acaba el "carril bici" y tenemos dos opciones: coger un camino a la derecha o seguir de frente por una subida muy pronunciada, casi imposible de subir sobre la bici (bueno, Baldo sí lo consiguió). Nosotros debemos seguir de frente.
Subimos la gran cuesta, y bajamos otra vez al camino del Canal. Unos metros más rodando y volverá a desaparecer, pero en esta segunda ocasión deberemos coger el camino de la derecha!!!
Se acabaron los caminos, y volvemos a los senderos estrechos y a las cuestas imposibles. El siguiente tramo es una larguísima bajada, muy rota y con mucha arena que nos llevará hacia el arroyo de Navarrosillos.
Aunque hay algunos que logran hacer la bajada completa sobre la bici, otros ponemos pie a tierra en algún tramo, y otros como Navalex acaban "volando" por encima del manillar de la bici. Suerte que el casco le salvó de un golpe en la cabeza, aunque vaya a pasar unos días con el brazo en cabestrillo. Por suerte, y aunque algo dolorido, pudo acabar la ruta sin problemas.
Hemos llegado al arroyo de Navarrosillos, y toca vadearlo. No tendrá más de cuatro metros de ancho, y su profundidad no será más de dos palmos, pero el fondo tiene grandes piedras, lo que hace imposible cruzarlo sobre la bici.
Nos descalzamos, nos remangamos los pantalones, cruzamos con la bici a cuestas al otro lado, y volvemos a calzarnos. Como ya lo había avisado, casi todos llevaban una toallita para secarse los pies.
Bueno, para ser exactos, nos descalzamos casi todos, porque Olivares prefirió cruzar sin quitarse las botas ni los pantalones. Creo que todavía debe estar secándolas ;-)
Nada más cruzar el arroyo, que es la mitad de muestro camino, a nuestra izquierda nos espera una subida muy empinada, que aunque algunos intenten hacer sobre la bici, finalmente todos tenemos que hacer a pie ¡menudo cuestarrón!
Seguimos subiendo y subiendo, ya sobre la bici, hasta llegar a una gran pradera en la que paramos a descansar. Las vistas desde allí hacia el valle del Manzanares son impresionantes, y además nos permiten ver toda la subida que hemos realizado.
En el siguiente tramo hasta el Puente de la Marmota tenemos varias bajadas muy pronunciadas. Como en todas las anteriores, los que tienen más técnica, como Baldo, Javi y Shinyeva consiguen hacer toda la bajada sobre la bici, el resto, en cuanto se complica mucho la bajada acabamos poniendo pie a tierra.
Cuando la pendiente se suavizaba, era curioso ver rodar por esos senderos tan estrechos a los 14 ciclistas en fila india.
El tramo de bajada al Puente de la Marmota es un camino con mucha roca y piedras sueltas, que acaba en una complicada calzada de piedra, pero con el callo que habíamos ido cogiendo durante toda la jornada yo creo que todos, o casi todos, lo conseguimos hacer sobre la bici. Como me decía uno de mis compañeros, "hoy me estoy divirtiendo más que en todas las rutas anteriores, y estoy aprendiendo de verdad lo que es una trialera".
Había llegado el momento de descansar, de comer algo, de contemplar el paisaje... ¡nos lo habíamos ganado a pulso!
Solo nos faltaba hacernos la foto de grupo, y emprender el regreso hacia Tres Cantos. Por suerte un amable chico americano nos hizo la foto, aunque como puede verse, muchos de mis compañeros en lugar de mirar a la cámara miraban a la rubia que le acompañaba y que estaba a su derecha ;-)
Se me olvidaba, un poco de historia... el Puente de la Marmota fue realizado entre 1756 y 1758, bajo mandato de Fernando VI. El puente se construyó para dar continuidad a la valla de El Pardo y permitir un paso de los caminos por el norte. Se eleva sobre un cañón natural, justo donde el Manzanares llega al Embalse de El Pardo, inaugurado en 1970.
El puente tiene 12 metros de luz, un tablero de 45 metros de largo, 4.7 de ancho, y una disposición inclinada de un extremo a otro.
(Lo repito, porque mis compañeros seguían mirando a la rubia y no me hacían ni caso cuando se lo contaba)
Como la zona es bastante inaccesible, con el paso de los años y las escorrentías de las lluvias, el puente se fue llenando de arena y como puede verse en la siguiente foto, tomada hace unos años, casi habían desaparecido los pretiles:
En una reciente intervención, y con ayuda de los helicópteros del Ejército, se ha conseguido eliminar toda esa arena y devolver el puente a su estado original.
Últimas fotos del Puente, y vuelta a las bicis. Un tramo de subida a pie, y cogemos el camino en dirección a Tres Cantos.
El camino va pegado a la valla de El Pardo. El primer tramo es una rápida y divertida bajada, pero pronto llega la temida subida de más de 4 kilómetros al mirador de Valdelaganar.
Una parada de reagrupamiento en el mirador, en la que aprovechamos para comer algo y quitarnos ropa, que el calor va pegando fuerte y vamos muy abrigados. Las vistas de la Sierra desde aquí son impresionantes.
Como en el puente de la Marmota no me hacían ni caso, aproveché aquí en el mirador para contar a mis compañeros el porqué del nombre de "la marmota", algo muy raro cuando ese animal no es propio de estas tierras. Al parecer, el nombre del puente se debe al cercano cerro de La Marmota, que originariamente se llamaba del 'mamotar' por su forma de 'mama' femenina.
Unos kilómetros de rápida bajada, y una dura subida nos pondrían en el carril bici de Colmenar. Aquí unos se bajaron pedaleando a Madrid, otros se quedaron tomando unas cañas, y los que teníamos más prisa cogimos el tren en la estación para no llegar muy tarde a casa. Hay que recargar el bonobici.
Vaya, no lo he conseguido. Me ha quedado el artículo casi más largo que la ruta. Lo siento por los que nos sigan desde el teléfono, porque puede tardar un siglo en cargar tanta foto ;-)
ResponderEliminarUna ruta muy recomendable, aunque no está al alcance de cualquiera, porque si no tienes algo de técnica y mucha resistencia puedes pasarte media ruta a pie empujando la bici.
Tendremos que repetirla algún día.
Madre, que cuestas!!!
ResponderEliminarUna ruta muy chula, pero demasiado dura para mí.
Un reportaje donde apenas se ve gente sobre la bici, creo que eso ya sirve para hacernos a la idea de la dureza.
ResponderEliminarEspero hacerla algún día, eso sí, me perderé las explicaciones :-(
Fer, no sabemos dónde están nuestros límites si no intentamos superarlos.
ResponderEliminarSiempre habrá una ruta que pensemos que es demasiado dura para nosotros, y si no la intentamos hacer, nunca sabremos si podríamos haberla superado con éxito.
Bueno, es que las fotos las hacía Baldo cuando estaba parado, pero yo diría que másdel 90% del camino lo hicimos sobre la bici. Bueno, algunos el 80%.
ResponderEliminarPodemos repetirla este invierno cuando quieras, pero de momento resérvate el sábado que viene para nuestra ruta gastronómica por Rascafría ;-)
!Que buena pinta tiene eso!
ResponderEliminarTengo que volver a apuntarme a alguna ruta con vosotros, que no os veo desde El Pardo...
A ver si estoy atento a una posible repeticion, de momento y con vuestro permiso ya he propuesto hacerla a un club de MTB con el que a veces salgo.
!Gracias por la cronica y por las fotos!
Efectivamente este Domingo intentaremos repetirla Olivares y yo. Sin luvia aunque segun parece con algo mas de fresquito.
ResponderEliminarQué ganas de ponerse ya bien y volver a repetirla.
ResponderEliminarMe apunto a la siguiente, pero iré directamente a la comida. Esto está yendo más lento de lo que pensaba.
Aalto te has currado bastante toda la información histórica de la ruta, tanto hoy en el texto como el día de la ruta. Y nosotros muy obedientemente seguimos tus instrucciones y no le quitamos ojo al mamotar (de la rubia)
:) :) :)
¡Qué pena habérmela perdido! Son de las que me gustan a mí, con senderitos enrevesados...
ResponderEliminarLos participantes, en esa foto que tenéis de grupo, parecéis salidos de esas gestas épicas en blanco y negro.
De izquierda a derecha: Zacarías Heiderman, Clauster Mider, Harris Schneider, Bolton Cluster, Hardem Buris, Burish Luman, Trusten Spiegel, Mauders Blounch, Holman Strugten, Anns Birusk, Boderin Yuroslav, Badins Spruggle y cerrando el grupo, Mudin Flauster... Bufff, menudo grupo de superhéroes.
Enhorabuena, muchachos.
Esperemos que el tiempo vaya aviejando la foto para darle más carisma a tal epopeya..
"Son de las que me gustan a mí, con senderitos enrevesados..."
ResponderEliminarY con las trialeras de Colmenar en el sentido adecuado, una gozada.
http://www.youtube.com/watch?v=_Yzts98Qx4s
Sí, sí, sin duda. Cuesta abajo, mucho mejor.
ResponderEliminarPero despacito, que luego nos hacemos pupa :)
ResponderEliminarQué tramposo, en el vídeo ha "recortado" la zona de subida. Seguro que la hizo a pie ;-)
ResponderEliminarNavalex, deja de pensar en la rubia y recupérate pronto, que se nos echa el invierno encima ;-)
ResponderEliminarJose, esta te habría gustado, y con tu bici ni te habrías enterado de las piedras. Vete haciendo hueco en la agenda para la próxima.
ResponderEliminarY algún tramo complicado ¿no? Juraría que había tramos muy complicados imposibles de pasar así.
ResponderEliminarSí, parece que hará fresco, sobre todo por la Sierra. Tenía pensado subir hacia Cotos el domingo, pero creo que no van a pasar de los 0º ni en las horas centrales del día. Se acerca el invierno... y la nieve.
ResponderEliminarSin 1000 ciclistas que adelantar no tiene tanto atractivo... Seguro que @vctorcc:disqus le hubiese batido XD
ResponderEliminarahora me he quedado con ganas de menso fotos de puentes y más de la rubia XD
ResponderEliminarhecho!
ResponderEliminarEl truco está en no tener miedo en dejarte la dentadura contra una piedra..jajajaja. Gracias, Nozi. Tú me ibas chupando la rueda, así que...tal para cual.
ResponderEliminarQue envidia me dá ver esa pedazo de ruta, que aún viendose un poquito dura, por el esfuerzo y tirar de la bici, reconozco que es preciosa, me quedo con las ganas de acompañaros la proxima vez.
ResponderEliminarSaluditosssssssssssssssssssss
"...aunque como puede verse, muchos de mis compañeros en lugar de mirar a la
ResponderEliminarcámara miraban a la rubia que le acompañaba y que estaba a su derecha
;-)"
Incluído tú, bandido, que se te ve un mirar de soslayo importante. JAJAJAJJA!!!
¿Cuándo me podré apuntar a una de éstas? Mecagüinnnn!
Pues que no te de envídia, y apúntate con nosotros la semana que viene ;-)
ResponderEliminarMartingala, voy a tener que ir a tu casa y raptarte para que te vengas con nosotros. No trabajes tanto, y deja algo de curro para los demás ;-)
ResponderEliminarBuena ruta y estupendas fotos. Veo que la dureza venía más bien de las empinadas cuestas que de caminos tortuosos. Al final si el problema es echar pie a tierra pues bueno, mejor eso que dejarte la rueda en una zanja.
ResponderEliminarEso esta echo..., y por supueato encantado... :-))
ResponderEliminarUltima llamada a los pasajeros del tren con destino colmenar viejo a repetir la experiencia ;)
ResponderEliminarjoder que si hacia frio...necesito un culote largo xo ya, jejeje que fríooooo
ResponderEliminarel tramo que va sobre las tuberias del CYII, que parece una antigua carretera, se peude hacer con bici de carretera/ciudad? Cuantos kms son? Es posible llegar sin hacer campo a traves? A que huelen las cosas que no huelen? :-)
ResponderEliminarMe sumo a la pregunta
ResponderEliminarSi os referís a lo que Aalto llama "carril bici", se puede llegar hasta allí por carretera (M618, Colmenar-Hoyo). Si lo buscas en googlemaps lo ves, está cerca de colmenar donde la carretera hace unas zetas, al lado del puente del Grajal.
ResponderEliminarSobre lo de meterse con una bici de carretera... yo no sé lo que aguanta una flaca. Con una de ciudad seguro que sí, no es un camino complicado.
Lo que pasa es que es muy corto, alrededor de 1 km o poco más. Para hacerlo de paseo andando está bien y puedes acercarte a las ruinas que te vas encontrando.
Vamos, así lo recuerdo yo del día de la ruta, no soy un experto de la zona :)
Ñoo, hemos respondido a la vez :)
ResponderEliminarEsto es como en el Oeste, gana el que contesta más rápido ;-)
ResponderEliminarGenial la ruta y la cronica. Cuanta foto!!
ResponderEliminarEsto más bien parece bicisenderismo..jeje
Me la anoto para hacerla en un futuro
Por cierto, que canteo lo de la foto, solo Aalto aguanta un poco la mirada a la cámara.jajaja
Muchas gracias Navalex y Aalto, lastima que sea un camino tan corto.. :/
ResponderEliminarYo tengo una urbana (Orbea Carpe H50) y mi novia una de carretera de los 80 (Peugeot Aubisque), la mia puede aguantar bien por caminos de grava y arena suelta, la suya tambien, aunque con mas cuidado de las piedras.
Hicimos la via verde del Tajuña y el tren de los 40 dias, que tiene buen firme, y la de la Jara, que no esta muy bien, sin ningun problema, y algun dia vamos a hacer algun tramo de grava del Canal de Castilla, pero nos gustaria encontrar alguna zona no muy complicada de hacer con la flaca (y con mi novia tambien)..
Muchas gracias a los dos. Yo también me meto a veces con la flaca por caminos. Hay que tener mucho cuidado sobretodo si vas con las ruedas de 23, pero si el camino está duro y liso puedes ir muuuy rápido.
ResponderEliminarVeo que habéis quitado del calendario la ruta por Rascafría que teníais prevista para el sábado, y tenía ganas de hacerla. ¿Es por la lluvia? ¿Váis a hacerla otra semana?
ResponderEliminarJosé, mira las fotos del puerto de Cotos. Está cayendo una buena nevada. Aquí puedes verlo en directo: http://ventamarcelino.com/webcam/
ResponderEliminarLas previsiones de la AEMET siguen dando lluvia (nieve más bien) para los próximos días, y el sábado la probabilidad de lluvia (o nieve) es del 95%. Me temo que va a estar muy complicado hacer esa ruta porque se nos echa el invierno encima. De todas formas no la descartamos.
Si estás a tento al blog, esta misma mañana publicaré un artículo sobre esa ruta. Espero que te guste y te anime a hacerla en cuanto las condiciones lo permitan ;-)