Menú horizontal

Este blog lo escriben exclusivamente voluntarios

¿Echas de menos un tema? Pídelo o escríbelo tú y enviálo a enbici@espormadrid.es y te lo publicamos en un par de días.

Si quieres colaborar sin escribir o si te ha gustado un artículo, puedes invitar a una caña a quien escribe, que siempre hace ilusión.


martes, 18 de septiembre de 2012

Aitana Sánchez Gijón en bici por Madrid

Carmen Rodríguez Santos para abc.es

En la terraza del madrileño Café Gijón que, felizmente, parece que sobrevivirá, Aitana Sánchez Gijón se toma un descafeinado. No es lo corriente, pues confiesa no ser «nada cafetera». Prefiere el té, que consume de manera habitual, y prácticamente siempre antes de salir a escena en cada función. No tiene antes de subir a las tablas rituales especiales ni supersticiones, pero si le gusta tomar tranquilamente un té. El Café Gijón es uno de sus sitios preferidos en Madrid. Considera que es un clásico, con grandes personajes ligados a su historia. Al abandonar la terraza, un camarero le pide un autógrafo para su hija, a lo que Aitana accede con amabilidad. Sobre todo ahora lo frecuenta mucho, al estar ensayando en el cercano Teatro Marquina la obra «Babel», de Andrew Bovell, que se estrena hoy. Dirigida por Tamzin Townsend, la obra, explica la actriz, «es un complejo thriller emocional, donde se refleja, a través de dos parejas, que interpretan a varios personajes, la falta de comunicación entre los seres humanos».

Aitana Sánchez Gijón en bici por Madrid
A los ensayos de la obra ha ido en bicicleta: «Me estoy aficionando a ir en bicicleta por Madrid. No me animo con grandes distancias, pero me voy manejando. Estoy muy contenta con el carril-bici que dicen se va a hacer por todo el centro, porque ahora mismo la verdad es que los ciclistas nos jugamos la vida. Aparte de este ejercicio, también practico el pilates y el yoga, que es un punto de referencia que dejo y al que vuelvo. Tuve una etapa en la que hacía mucho yoga, pero ahora hago más pilates. Me sienta muy bien. Me coloca la espalda, me quita los dolores».

Aitana, que confiesa que le gusta mucho comer, compra en supermercados, en mercados tradicionales, y de vez en cuando en tiendas de delicatessen, cuidando de no pasarse mucho el presupuesto: «La crisis nos están afectando a todos». No obstante, dice, le resulta difícil renunciar a un buen plato de jamón de Jabugo, una de sus comidas predilectas.


En un día de asueto, Aitana sigue el siguiente esquema: «Me levanto a las ocho con los niños. Les preparo la intendencia. Mi marido se los lleva al colegio. Aprovecho esa mañana para hacer pilates, ir a alguna clase de baile, nadar un rato. Como en casa con tranquilidad. Recojo a los niños del colegio y volvemos a casa en coche o en bici. En bici es un buen plan si hace bueno, y estoy aficionando a mis hijos a la bicicleta. Aunque la verdad es que se resisten. Y luego suelo quedarme en casa, leyendo, o invito a una amiga para charlar».

Sus hobbies son sobre todo la lectura, el cine y el teatro, y este último, puntualiza «no porque sea actriz». Entre los últimos libros que ha leído está «Libertad», de Jonathan Frazen: «Me apasionó. Acabé llorando como una magdalena. Me costaron las cincuenta primeras páginas, pues no terminaba de entrar en la historia, pero como no soy de las que abandonan, sino que insisto, consiguió atraparme. Me parece un novelón que refleja la sociedad norteamericana contemporánea, aunque también, en definitiva, el modelo de sociedad en que vivimos todos. Franzen ha sido un descubrimiento, y se ha convertido en uno de mis escritores preferidos. Otro descubrimiento ha sido Jaume Cabré, uno de los mejores autores catalanes, del que ahora he leído "Yo confieso". Me fascinan los novelistas del siglo XIX, donde está la gran novela: Flaubert, Stendhal, Pérez Galdós. Son como mis puntos de referencia. En cine, la última película que he visto ha sido "El amigo de mi hermana", una comedia deliciosa. En teatro, fui a ver un ensayo de "¿Quién teme a Virginia Woolf?", pues no quería perdérmela. Me es difícil ir a ver teatro, al coincidirme con el horario de mis funciones cuando estoy trabajando».

30 comentarios :

  1. Deberíais contactar con la chica para darle una de vuestras clases magistrales y que la próxima vez no diga que se juega la vida como si estuviese escalando sin cuerda ;)

    ResponderEliminar
  2. Puff... Esta entrevista si se puede llamar así me parece bastante pésima (disculpad mi hostlidad a quién la haya hecho y redactado), y más aún con una señora como esta que vive la buena vida. Vamos que no aporta nada interesante a la causa ciclista madrileña y que tampoco da lugar a fomentar su uso cotidiano (sólo si hace bueno eh... ). Seguro que es de las que van por la acera en su brompton. Y lo de los hijos en bici... no lo veo. En fin habla de sus tranquilos días propios de una marquesa comiendo jamón, haciendo pilates y nadando para hacer algo interesante durante el resto del día.... Lo siento si he ofendido a alguien.

    ResponderEliminar
  3. No le déis tanta importancia.Yo creo que el interés de la notica se debe a que un famoso usa la bici para moverse por Madrid.Y algo es algo, me parece a mi.Lo demás es menos relevante, lo importante es que usa la bici(aunque sea a veces, aunque sea sólo con buen tiempo etc etc etc).
    Me conformo.

    ResponderEliminar
  4. Comparto lo que dices pero es que la idea que se me queda de todo lo que dice en la entrevista es que la bici es peligrosa cuando dice "
    porque ahora mismo la verdad es que los ciclistas nos jugamos la vida". Cosa que no considero para nada cierta si tienes cuidado y sigues unas normas básicas. Aunque no está exento de peligros, pero vamos, lo que quiero decir es que me parecen respuestas insulsas y que no apoyan la causa de la bici. De hecho se usa más la palabra pilates que bicicleta.

    ResponderEliminar
  5. Yo ya veo que si Aitana ya se lo plantea, queda poco para ver cumplida mi fantasía de ver a Carmen Lomana en la bicicrítica:
    http://www.enbicipormadrid.es/2012/02/carmen-lomana-en-la-bicicritica.html

    ResponderEliminar
  6. Querida Aitana:
    Para ser tan leída me patina un poco el uso que haces de la palabra "intendencia". Parece que no es la apropiada para lo que quieres expresar.
    Quizá "almuerzo" sea mejor en este contexto.
    http://lema.rae.es/drae/?val=intendencia
    http://lema.rae.es/drae/?val=almuerzo

    ResponderEliminar
  7. Yo no puedo entender que alguien que piensa en serio que se está jugando la vida por ir en bici lo haga, y más teniendo hijos.
    Yo lo veo más como la típica frase para darte importancia (y para pedir carril-bici, claro).
    Yo hago justo lo contrario, cuando me preguntan que tal con la bici por la jungla de Madrid les digo que si sabes lo que haces, eliges bien tus rutas, no pasa nada, que no es para héroes, sino para cualquiera.

    ResponderEliminar
  8. Discrepo.Si fuera para "cualquiera", Madrid estaría lleno de bicis y no es el caso.Si me das a elegir entre "héroe" o "cualquiera", creo que los que usamos la bici en Madrid tenemos más de lo 1º.Respecto a lo de jugarse la vida, ¿los que se drogan por qué lo hacen?¿y los que fuman?.Todos ellos saben que es malo, se están jugando sus vidas, pero no pueden evitarlo y lo hacen.Pues esto es lo mismo. La bici es una droga de otro tipo.Yo sí la entiendo.

    ResponderEliminar
  9. Discrepo de tu discrepancia. Es puro desconocimiento, y la prueba es que basta una simple explicación acompañada de 2-3 horas para que la mayoría de la gente que pensaba que no se podía se convierta en ciclista habitual.

    ResponderEliminar
  10. Ojo, ella no dice que no se pueda( de hecho ella lo hace) simplemente dice que "se juega la vida", que no es lo mismo.Yo, repito, la entiendo.
    Podremos decir que ir en bici por Madrid no es peligroso, pero no es del todo cierto.

    ResponderEliminar
  11. Sí, pero cuando la sensación de peligro pasa de un tema puntual (que siempre hay algún día tuerto) a una constante diaria, es que el ciclista no lo está haciendo bien. Y hasta me aventuro a imaginar los problemas que tendrá: circulando pegadito a los coches aparcados, con los que vienen por detrás adelantándola sin dejar distancia de seguridad, cerrándola el paso en giros a la derecha y demás.
    Casi todos los problemas del ciclista en Madrid se solucionan cambiando la manera de circular en bici. Y lo que no se puede solucionar, es puntual, no un "jugarse la vida constante".

    ResponderEliminar
  12. Hagamos una cosa, una miniencuesta para los ciclistas vehiculares de a diario: ¿Cuántos accidentes habéis tenido en los últimos cinco años circulando por Madrid?. Empiezo yo: 0.

    ResponderEliminar
  13. Hola, por circunstancias (vacaciones) llevo esta semana moviéndome por madrid en bici en dias de diario, y no tiene nada que ver la "fauna" cochista con la de los findes. Lo siento, pero sólamente con las calles tranquilas no es suficiente, y lo digo de primera mano, que en dos días ha habido 2 taxis, 2 autobuses y varios macarras que casi me llevan por delante- PD: Sé circular en bici por la ciudad. Un saludo

    ResponderEliminar
  14. Yo me caí dos veces cuesta abajo por no saber soltar una mano y frenar a la vez con la plegable. En todo caso, nada achacable a los demás.

    ResponderEliminar
  15. Pues yo me aventuro a creer que circula por la acera porque ir por la calzada es "jugarse la vida"

    ResponderEliminar
  16. Cuéntanos los casos, Taco. Yo tengo algún macarra de vez en cuando, pero 1 al mes o cada 2 meses como mucho. ¿Qué calles eran y en qué circunstancias pasó?

    ResponderEliminar
  17. Calle Sagasta, hace 8 años, clavo los frenos al cruzarse un taxi sin señal alguna para soltar al pasajero donde este le exige. Al frenar a fondo y, dada mi inexperiencia entonces, no regular y frenar menos con el delantero o bajar el CdG, salgo volando por encima y me fracturo ambos brazos. Escafoides en el dcho. y cúbito y radio en izdo.
    Calle Santa Isabel, la semana pasada: está haciendo obras el ayto, en el último tramo de la calle, junto al Reina Sofía. Una furgoneta del ayto. decide ahorrarse una vuelta y, para ello, mete marcha atrás y empieza a desandar Sta. Isabel a toda leche hasta una bocacalle. Yo, bajando Santa Isabel, veo que la furgo se me viene encima, toco el tiembre, grito como un poseso... (no puedo quitarme de su trayectoria, hay zanjas a ambos lados). Al final paró cuando le golpeé el cristal trasero de la Berlingo con las manos, para entonces ya había doblado mi rueda delantera un poco. Un caso curioso de atropello "marcha atrás". Pero nada serio, no llegué a caerme, lo peor fue el cabreo. Y eso es todo (toco madera)

    ResponderEliminar
  18. Pues en unos 2000 Km que llevaré este año por Madrid, la única situación realmente peligrosa la provoqué yo mismo.

    ResponderEliminar
  19. Pues he tenido de todo. El lunes: Un autobús que me cerraba contra la acera porque se tiró a la parada justo después de adelantarme, un taxista que casi me afeita la pierna al adelantarme y un par de macarras que me querían sacar de la calzada al salir de los semáforos. Todo ello en Arturo Soria al salir de los semáforos, sentido descendente, entre la DGT y la unión con calle Alcalá, hacia las 18.30. Ya, Arturo Soria no es una calle tranquila, pero yo circulaba "como un vehículo más" , señalizaba las maniobras, etc etc...y los otros episodios han sido menos graves, ayer el autobus en Alcalde López Casero (subida) que debia de llevar prisa, un idiota en la calle Samaria (que tiene dos carriles de subida) hacia el Retiro que me paso cerca y deprisa, y otro taxista en Máiquez hacia las 21 horas que estaba empeñado en saltarme por encima. La verdad es que se nota mucho la diferencia de circular entre semana o hacerlo en fin de semana. Hasta ayer no lo tenía del todo claro, pero ahora si que estoy convencido de que hay que hacer más en términos de infraestructuras. Un saludo

    ResponderEliminar
  20. Y que piensas que consiguen esas infraestructuras? O que tipo de infraestructuras crees que son necesarias? Realmente piensas que el que te adelanta y luego te cierra te va a respetar cuando vayas por un carril bici y el tenga que girar a la derecha o se tenga que incorporar a una calle? Lo único que consigues con esas infraestructuras, es que aún mas gente piense que los ciclistas no pintan nada en la calzada.

    ResponderEliminar
  21. La diferencia que he notado yo es que en fin de semana el tráfico va más rápido. Llevo casi 3 años circulando en días laborables por calles tipo Bravo Murillo y lo que tú me cuentas que te ha pasado en 2 días, a mí me pasa a lo largo de un año, y sólo los casos menos graves que comentas. Así que, una de dos:
    1- O yo no me doy cuenta
    2- O circulo de una manera distinta a la tuya
    3- ..... (a rellenar por el usuario).....

    ResponderEliminar
  22. Axel, yo creo que se puede conseguir mucho. No estoy hablando de arrinconar las bicis a los carriles bici, sino de dar un espacio propio en calles con tráfico pesado o en aquellas que tienen varios cariles. Y, por ahora (que todo puede suceder), ningún autobús me ha arrinconado ni ningun taxi me pitado en el carril bici de O' Donnell, por ejemplo.

    ResponderEliminar
  23. A mí me han pitado en O'Donnell por no ir por la acera-bici.

    ResponderEliminar
  24. Está claro que idiotas hay en todas partes, y a todas horas. Respecto a tu anterior respuesta, puede ser que yo sea mas sensible al tráfico diario, porque no circulo en bici entre smana, y a lo mejor he sufrido la Convencion Madrileña de Conductores Incivicos, pero los hechos son los hechos (tambien he de decir que en fin de semana prácticamente no he tenido nunca un problema). Y en mi opinión (esto ya es una opinión), hacen falta más infraestructuras, especialemte en calles rápidas.

    ResponderEliminar
  25. Y nunca has tenido que frenar por un coche que giraba a la derecha sin mirar ni nunca te has encontrado con un coche medio del carril incorporandose a O'Donnell? Yo no te digo que no haya ceporros, pero no veo como se soluciona ese problema creando un problema aún mayor.

    ResponderEliminar
  26. Según lo comentas, estoy recordando que las primeras semanas que empecé con la bici por calles gordas me pasaban más las situaciones que comentas, aunque con el tiempo he podido aprender a evitarlas con mi propia manera de conducir. No siempre funciona (el otro día un taxista apuró un espacio imposible y me dejo menos de medio metro), pero ya se convierten en excepciones, no en un día a día agobiante.

    ResponderEliminar
  27. Pienso que Taco, como el dice, es mas sensible al tráfico entre semana, que es diferente del del fin de semana.
    Entre semana hay mas agobio, mas buitreo, mas ruido, etc. Esto impresiona los primeros días, enseguida te habitúas y lo que antes te parecía una maniobra peligrosa, ahora te parece normal (opción 1), por ejemplo, te adelantan dejando menos espacio del que esperas y te asustas. Sin embargo, para el que hace el adelantamiento, hay espacio de sobra. Cuando ves que te ocurre continuamente y que nunca pasa nada, cambias tu umbral de peligro. Evidentemente si te adelantan a menos distancia hay mas peligro, resulta que no es tanto como pensabas.

    ResponderEliminar
  28. Yo he tenido alguna caída por mi propia incompetencia, sin relación con el tráfico.
    Aunque pueda sonar raro, en las situaciones mas delicadas en las que estado, la mayoría de las veces ha sido por culpa de peatones cruzando la calzada por cualquier parte, sin mirar, etc

    ResponderEliminar
  29. Miras la foto, quien es, lo que hace durante el día y no das crédito a lo de jugarse la vida.


    Es hasta beneficioso. Te imaginas a Aitana, con una bici de paseo, con cesta y flores en ella, pedaleando despacito para ir a tomar el té después de hacer pilates y diciendo al llegar: "!uff, me he jugado la vida!" y piensas, si es así de peligroso, creo que me arriesgaré ;-)

    ResponderEliminar